TORNA MIÉL TODA MI SAL.


Me sumergí en el recuerdo
de aquel amor del ayer,
el tierno amor que se fue
y me perdí entre el silencio;

un nostálgico momento
que se exudó por mi piel,
que se tornó inmensa sed
de tus caricias y besos;

inmenso mar de locura,
de angustia y de ansiedad,
donde se peina la luna

cómplice de este penar:
dime, mujer, dónde estás,
torna miel toda mi sal…

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: