Cuando no estás me duele el alma,
un dolor desgarrador la atraviesa sin pudor,
cuando no estás no soy nada,
llega la tormenta y el trueno aterrador.
Cuando no estás todo es un sin sentido,
no hay luces que iluminen los caminos,
los amaneceres solo huelen a olvido,
la tristeza me abraza con su aflicción.
Cuando no estás la melancolía se hace presente
cabalgando por la linde de mis venas,
la soledad se cobija sin querer quererme,
el latir de mi corazón ya no se acelera.
Cuando no estás se apagan las estrellas,
las nubes ocultan la luz del sol,
se eclipsa la luna lunera,
y aunque respiro siento que muero.
Cuando no estás solo quiero que estés,
te sueño despierto para sentirte otra vez,
te imagino en mis brazos comiéndote a besos,
por verte otra vez, sigo viviendo.