Así con la luna ausente
sin estrellas en el cielo
flota un beso en el ambiente
buscando a su paralelo.
Y mientras vaga en su vuelo
baja a beber en la fuente
el agua que de un riachuelo
la convierte en confidente.
Y ya el beso se ha enterado
que al llegar de la alborada
un ósculo resplandece.
Pero se encuentra nublado
y por ser de madrugada
el beso… se desvanece.
Hay suspiros que son besos
yo he escuchado muchos de esos.