Suavecita y tiernamente
quiero sentir tu mirada
que te muestre enamorada
al mirarnos mutuamente.
E intercambiando miradas
que descubras en la mía
un mundo de fantasía
cuando están entrelazadas.
Pues verás a mi alegría
en los versos que de amor
nadie me inspira mejor
porque tú eres poesía.
Y cual pétalo de flor
en el libro de mi ser,
quiero guardarte mujer
y solo yo… ser lector.