Tu cabello es hermoso,
tus ojos, ni hablar;
tus labios sabrosos
deben ser un manjar.
al igual que tu mirar;
tu figura debe ser
poesía al andar.
que acaricia mis oídos;
y tu fragancia es un elixir
que enciende mis sentidos.
hermosa como una flor;
y tu gracia primorosa
cautiva mi corazón.